Economía El blue bajó cerca de 20 centavos, el dólar oficial sigue en alza y la brecha se redujo al 50 por ciento Descartada la estrategia de un desdoblamiento formal, el equipo que comanda Axel Kicillof busca achicar el gap a toda costa. Apela a distintas estrategias, de cara a un verano en el que se registrará una fuerte demanda de divisas. El BCRA apura el ritmo devaluatorio, con reservas en caída libre
La semana cerró con importantes movimientos en la city porteña, en línea con la estrategia que busca imponer el equipo comandado por Axel Kicillof.
El dólar blue se vendió a $9,50, es decir, 19 centavos por debajo del cierre anterior, cuando había dado un salto de más de 7 centavos y terminó a $9,69.
Por su parte, la cotización del tipo de cambio oficial se ubicó en los $6,25, lo que ratificó la intención del Banco Central de seguir acelerando la devaluación para achicar el gap.
Si se compara la última cotización del billete verde que fija el BCRA con la registrada un mes atrás, la devaluación crece a un inédito ritmo anual del orden del 77%.
La razón de semejante suba es que el Ejecutivo busca, por todos los medios, reducir la brecha que separa a ambas cotizaciones, que ahora se ubica en el 52%.
Operadores consultados por iProfesional afirmaron que la baja de la divisa blue en la rueda del viernes se debió a que tanto Anses como el Banco Central volvieron a vender bonos para frenar la escalada, a lo que se suma, en menor medida, el anuncio oficial de que se flexibilizará el acceso al mercado de cambios para turistas.
¿Tendrá éxito el Gobierno? A esta altura, cabe la pregunta sobre si el nuevo equipo comandado por el ministro de Economía, Axel Kicillof, tendrá éxito en su cruzada por achicar la brecha.
Más en un contexto como el actual, en el que quedó descartado un desdoblamiento formal del mercado cambiario, una medida sobre la cual se venía especulando antes de la designación de Kicillof y del titular del BCRA, Juan Carlos Fábrega.
Lo que los inversores interpretan es que el Gobierno diagnosticó que la propia existencia de la brecha es lo que se debe combatir.
A fin de cuentas, esta distancia es lo que lleva a que los argentinos sientan que hay un atractivo por viajar al exterior y "reventar" la tarjeta de crédito.
Y a medida que se acercan las vacaciones, es evidente que esa brecha echa más nafta a la hoguera de la pérdida de reservas del Banco Central.
Pero, además, los turistas necesitan dinero en efectivo para los gastos menores por lo que recurren a las cuevas a las cuevas.
Por este motivo, una de las mayores dudas consiste en si en las próximas semanas, cuando se intensifique la demanda en el mercado informal, el Gobierno será capaz de mantener al blue bajo control.
Tal como diera cuenta iProfesional, el ex asesor del Banco Central, Francisco Gismondi, se muestra escéptico respecto al éxito que pueda obtenerse en cuanto a mantener a raya la brecha: "No va a bajar por mucho tiempo. Ahora se está achicando artificialmente, pero no veo que el blue se quede quieto por debajo de los $10 y que el oficial lo alcance".
"Además, en diciembre habrá más pesos en circulación, a lo que se suma el 'efecto aguinaldo', cuestiones que meterán más presión alcista al paralelo", agrega Gismondi.
Por lo pronto, el Gobierno ha evitado el desdoblamiento, que a ojos de varios analistas hubiese sido un parche temporal que habría contribuido en el corto plazo para mejorar la situación actual.
No obstante, avanzar en este sentido no habría sido bien visto por los organismos internacionales que rechazan este tipo de iniciativas. Y esto ha sido tenido en cuenta por el Gobierno, que necesita amigarse con el mercado de crédito externo, habida cuenta de un nivel de reservas que sigue en caída libre.
Lista de deberes Los bonos en manos del Gobierno son una de las principales armas con las que cuenta en su ataque a la brecha cambiaria y para su plan de "derribar" el precio del conta con liqui.
Por lo pronto su cotización descendió en pocas ruedas de los $9,15 vigentes al final de la gestión de Marcó del Pont a los $8,50 actuales.
También se está trabajando en morigerar la pérdida de reservas del Banco Central, recurriendo a fuentes de financiamiento externas.
Pero, antes de prestarle dinero al país, los organismos internacionales exigen que cumpla con una serie de requisitos. Tal como diera cuenta iProfesional, entre ellos figuran:
• Cerrar el conflicto con YPF. • Arreglar con el Club de Paris. • Establecer un nuevo índice de precios. • Aceptar que el FMI audite a la Argentina. • Resolver el litigio con los fondos buitre.
Reservas en situación crítica "Todo lo que pueda hacerse para lograr algo de financiamiento externo resulta hoy en día más que necesario. Porque las reservas se agotan y si siguen en baja puede pasarse un umbral a partir del cual se dispare una corrida contra el peso", sintetiza el analista Agustín Cramo.
Este viernes la entidad logró terminar con un saldo comprador de u$s30 millones en el mercado de cambios e intervino fuerte en los futuros de dólar para reducir las expectativas de devaluación. Así, las arcas de la entidad subieron u$s3 millones en la última jornada de la semana.
Sin embargo, el dato clave es que, en el acumulado de la primera semana de diciembre, las reservas terminaron en rojo: cayeron u$s617 millones para cerrar en u$s30.480 millones.
Cabe destacar que este viernes, la entidad que conduce Fábrega, modificó una normativa para tener más poder de fuego en el mercado de dólar futuro.
Mediante la Comunicación A 5501, el Central amplió la participación que pueden tener los bancos con el BCRA en el mercado de dólar futuro. Incrementó el monto que pueden operar de u$s600 millones por mes a u$s800 millones.
La idea de la entidad es tener más espalda para intervenir en los futuros de dólar, para "marcar la cancha" y desinflar expectativas a una devaluación "descontrolada" del dólar oficial.
Fuente: IProfesional
Sábado, 7 de diciembre de 2013
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