Sábado 23 de Noviembre de 2024 Resistencia - Chaco
 
 
 
 
 
 
Economía
¿Qué hará el BCRA con la tasa que rige al plazo fijo?: esto anticipan en el mercado
El INDEC difundirá el jueves inflación de diciembre. Massa anticipó que será menor al 5%. Los riesgos de bajar los tipos de interés
Ante una inflación que en noviembre sorprendió a la baja en 4,9% y la expectativa del Gobierno de que el alza del costo de vida en diciembre también empiece con un 4, la incógnita en el mercado es que hará el Banco Central este jueves con la tasa de política monetaria y el rendimiento de los plazos fijos si el índice de Precios al Consumidor resulta, efectivamente, inferior al 5%.

La entidad monetaria mantiene la tasa de interés del plazo fijo sin cambios desde hace tres meses. La última vez que la tocó fue el 15 de septiembre, cuando la elevó 5,5 puntos y llevó la Tasa Nominal Anual (TNA) al 75%, lo que equivale a una Tasa Efectiva Anual (TEA) del 107%.

Hasta ese mes, el BCRA venía ajustando el rendimiento de esos instrumentos de inversión cada 30 días desde comienzo de año, pero en octubre cesó esa política. Y hace dos meses que la tasa es real positiva ante la desaceleración de la inflación.

En el mercado creen que si en diciembre la inflación se ubica por debajo del 5%, y al haber comenzado ya un año electoral, el BCRA podría estar tentado a reducir la tasa de interés ante señales de enfriamiento en la actividad económica y la caída del crédito por el mayor costo de financiamiento, lo que afecta también al consumo.

Para la mayoría de los analistas consultados por iProfesional, bajar la tasa de interés ahora sería una "decisión apresurada y arriesgada" que podría presionar sobre los dólares paralelos en un escenario de escasez de divisas y exceso de pesos por la gran emisión monetaria de diciembre. Esto, en el contexto de la caída en la demanda de dinero que suele darse a partir de febrero.

Tasa versus inflación: la tentación de bajarla
Tras la sorpresa inflacionaria de noviembre, el ministro de Economía Sergio Massa dijo el fin de semana que la inflación en diciembre "estaría también con el cuatro adelante".

A su vez, el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) difundido el viernes por el BCRA mostró que las expectativas de inflación para los próximos seis meses cedieron por primera vez desde febrero 2021: diciembre bajó de 6,3% a 5,5%, enero de 6% a 5,6% y febrero de 5,9% a 5,7%. Además, en lo que va de enero, la entidad monetaria desaceleró el ritmo de ajuste diario (crawling peg) del dólar oficial.

Ante este panorama, un informe de GMA Capital planteó que "la baja transitoria de la inflación de noviembre y la probable desaceleración en diciembre reabren el debate sobre la tasa de interés, que hoy es dos dígitos positiva; la tentación oficial para aflojar el torniquete ante los signos de enfriamiento de la economía en pleno año electoral es tan grande como cierta".

"Los guarismos de hoy podrían lucir excesivos para las urgencias de la política propiamente dicha, con las elecciones cada vez más cercanas en el calendario. No debería sorprendernos que aparezcan presiones para intentar mejorar el bolsillo", especuló la Alyc al esgrimir que "los objetivos electoralistas podrían irrumpir en cualquier momento con la idea de que reducir el costo del crédito podría incentivar el consumo, traccionar el nivel de actividad y mejorar las chances del oficialismo".

Por caso, indicó que "el crédito al sector privado se está contrayendo a tasas de 2 dígitos netas de inflación, con financiaciones al consumo que se hunden 20% anual real".

A su vez, el analista financiero Christian Buteler evaluó que "de confirmarse el dato de inflación que dejó entrever Massa, es muy probable que la tasa de política monetaria del BCRA baje".

De hecho, Buteler alegó que "ya bajó la tasa de los bonos en el mercado secundario, también en las nuevas emisiones de deuda Tesoro, bajaron las expectativas de inflación del REM, lo mismo con el crawling peg".

"La tasa que tiene que ser más alta es la del Tesoro que es quien necesita financiar su déficit fiscal, tiene que liderar la tasa que tiene que ser positiva pero estar por sobre lo que paga el BCRA. De esa manera, logras canalizar parte de los fondos del ahorrista al Tesoro, y no a los bancos. Por eso creo que sería muy importante que el BCRA baje la tasa", fundamentó.

Pablo Repetto, jefe de research de Aurum Valores, consideró que "la situación no está lo suficientemente confortable para ejecutar una baja de la tasas pero las señales parecerían indicar que van a intentarlo asumiendo un riesgo; si lo hicieran quedará claro que la política manda y podría interpretarse como una decisión electoralista".

Asimismo, Alejandro Giacoia, economista de EconViews, dijo: "No descartamos que el BCRA baje la tasa, viendo que el Tesoro ya la bajó en la última licitación". Y subrayó que el aspecto positivo es que esa medida "permite que se emita menos para pagar intereses".

Para Salvador Vitelli, "tentarse con algunos buenos datos (de inflación) y querer bajar la tasa puede ser prematuro, porque si bien está pegando en el nivel de actividad, enero y febrero suelen ser meses bastante calientes en precios y en marzo se desploma la demanda de dinero. Así, habrá más pesos en el mercado buscando ir a comprar cosas y eso repercutirá en la inflación".

Tasas: ¿por qué el BCRA debería mantenerla sin cambios?
Emiliano Anselmi, analista de PPI, argumentó: "Si mirás las expectativas de inflación del REM, sólo bajan para diciembre-febrero, pero para el período marzo-mayo se mantuvieron prácticamente sin cambios, lo que te muestra que los analistas no ven una desaceleración tan marcada".

En ese marco, el analista evaluó que bajar la tasa "sería una decisión apresurada". De hecho, en PPI subrayaron que "la inflación de la Ciudad de Buenos Aires de diciembre fue 5,8% y quedó inalterada respecto de noviembre", y acotaron que "estos guarismos no hacen más que agigantar el interrogante sobre las declaraciones de Massa".

En sintonía, Fernando Baer, economista jefe de Quantum Finanzas, sostuvo que "la consolidación de la baja en la inflación va a costar", por lo que "bajar ahora la tasa sería prematuro, una mala señal de apuro ante la caída de la actividad, pero sin tener bases sólidas de desaceleración inflacionaria".

Con igual mirada, Claudio Caprarulo, director de Analytica, afirmó que "no sería deseable que el BCRA baje la tasa de interés. Tendría que mantener en el nivel que está ahora mientras se desacelera la inflación, porque eso genera rendimientos reales más positivos y ofrece una buena alternativa a la liquidez".

"En febrero hay una caída en la demanda de pesos, por lo cual es importante que se mantenga una tasa de interés real positiva lo más alta posible, sin que eso genere complicaciones en otros frentes", destacó.

Tobías Pejkovich, economista de Facimex Valores, concordó que "si bien la inflación sorprendió a la baja entre septiembre y noviembre, creo que bajar tasas sería una mala decisión en la antesala de la caída estacional de la demanda de pesos y ante un escenario que no termina de confirmar si la desaceleración inflacionaria se trata de un fenómeno transitorio o permanente".

Asimismo, Santiago Manoukian, economista de Ecolatina, aseveró que "frente al equilibrio inestable en el que se seguirá moviendo la economía ante a los enormes desafíos provenientes del frente de los dólares y los pesos, creemos que sería prudente la decisión de mantener inalterada la tasa a fin de mostrar firmeza en los objetivos de anclar las expectativas de inflación, mantener a raya la brecha cambiaria y contribuir a sostener la demanda de pesos".

"Esta es una de las claves para minimizar los riesgos de estrés cambiario y/o en el mercado de la deuda en pesos; al menos, hasta tanto la reducción del ritmo de inflación se consolide y extienda en el tiempo", agregó.

Tasas: el riesgo sobre el dólar
El dólar blue subió $2 este martes 10 de enero y cerró en $357, con lo cual volvió al valor récord que había alcanzado el 28 de diciembre, en tanto que bajaron los dólares financieros que se negocian en el ámbito bursátil.

En este contexto, Pejkovich alertó que "un recorte en las tasas de interés generaría mayores presiones sobre el tipo de cambio implícito, el cual está claramente subvaluado con respecto a las variables monetarias y la historia reciente".

Caprarulo advirtió que el peligro de bajar la tasa es "que en los próximos meses vas a tener más presión sobre la dolarización de carteras, sobre todo en un año de elecciones y en meses que son más complejos acumular reservas. Por eso, salió a ahora la firma del swap con China" . Al respecto, explicó que "el riesgo principal es que los rendimientos no logren compensar el riesgo inversor que hay respecto al tipo de cambio y que la mayor liquidez que va a haber, los pesos que estén dando vuelta, busquen dolarizarse".

Para Repetto, "el problema que enfrentan es que como hay cepo, la tasa de devaluación que importa al inversor es la del dólar que se puede comprar". Y acotó que "si bajan la tasa mucho, corren el riesgo que la tasa de devaluación del dólar libre se acelere y eso se filtre a los precios".

Con el mismo diagnóstico, la economista Natalia Motyl señaló que "apresurarse a bajar la tasa de interés es un arma de doble filo porque implica volver menos atractivo los instrumentos en pesos en un contexto donde los activos en moneda extranjera suben su valor. Eso induce a que los inversores se pasen a esos activos y podría generar mayores presiones sobre el mercado cambiario".

Por otro lado, Motyl explicó que "la reducción de tasas aumenta la actividad productiva local, ya que reduce costo de financiamiento de empresas que dependen de los insumos del exterior. Eso también generaría presiones a las importaciones de insumos y, por ende, a la necesidad de acceder a dólares que hoy en la Argentina escasean".

En GMA Capital también alertaron que "relajar apresuradamente el torniquete monetario podría darle vitaminas al dólar financiero, que es la variable sobre la que la tasa en pesos parece tener mayor influencia en el corto plazo", por lo cual juzgaron que "sería prudente mantener una política monetaria dura y, al mismo tiempo, acelerar las señales fiscales positivas iniciadas desde julio y no ralentizar el ritmo del crawling peg".

Por su parte, el economista Federico Glustein estimó: "La tasa de Leliqs y plazos fijos no creo que baje por el momento, aunque sí pueden reducir la de las cauciones", y auguró que si reduce el rendimiento de los plazos fijos "es un error porque esos fondos pasarán a dólar".

El analista Gustavo Ber hizo hincapié en "el cuidado que requiere reducir la tasa de interés, toda vez que podría tener repercusiones sobre los dólares financieros que vienen anestesiados recientemente, pero una mayor cobertura pre electoral junto a una caída en la demanda de dinero deberían reanudar pronto su reacomodamiento alcista".

Fuente: Iprofesional


Miércoles, 11 de enero de 2023
...

Volver

   
   
 
 
   
  Copyright ©2012
www.TiempoFiscal.com
Todos los derechos reservados
Fundación IEFER