Francia Cristina visitará hoy a Hollande con el Club de París como tema excluyente La presidenta y su par francés almorzarán y luego hablarán con la prensa. Ayer, la jefa de Estado argentina fue agasajada con un desfile militar frente a la tumba de Napoleón, personaje histórico por el que tiene predilección.
Cristina Fernández se paró sobre el piso adoquinado de la sala de armas del palacio de Des Invalides, el museo del Ejército de Francia, donde se encuentra la tumba de Napoleón Bonaparte. Frente a ella, en formación militar, le comenzaron a rendir honores los soldados de la Guardia Republicana, unidad ceremonial de la Gendarmería francesa. De uniforme azul, subfusil con bayoneta calada y un gorro tipo kepí con penachos rojos, los efectivos –que no sólo eran hombres, también había alguna mujer de uniforme, pelo atado en colita y gesto marcial– marcharon al sonido de los tambores, cantaron la Marsellesa, himno nacional de los locales. También escucharon en silencio una muy buena versión del himno argentino, que interpretó la banda musical de la Gendarmería gala. El reconocimiento recibido por la presidenta responde a una tradición del Estado francés, que así suele agasajar a los mandatarios extranjeros.
Los restos mortales de Napoleón están enterrados a pocos metros, en una enorme tumba coronada por una bóveda con revestimientos de oro que los parisinos llaman "le Dôme". Cristina tiene cierta predilección por el general de artillería que logró ordenar el caos preexistente y creó nuevas leyes, como el Código Civil, el Código de Comercio y el Código Penal, que perduraron por siglos. Sonriente y con la bota ortopédica con la férula que le inmoviliza el esguince de tobillo, la jefa de Estado estuvo acompañada por la ministra de la Francofonía del gobierno de François Hollande, Yamina Benguigui, y por un general del Ejército francés, Henri Bazin. Como miembros de la delegación argentina, también estuvieron el canciller Héctor Timerman; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro; y la directora de Cultura de la Cancillería, Magdalena Faillace.
La visita presidencial a Des Invalides puede ser leída como un preámbulo, un gesto hacia los anfitriones pero también una satisfacción personal, antes de que comiencen las actividades más importantes de la agenda de CFK en Francia. Hoy al mediodía, Cristina será recibida por el presidente francés, el socialista François Hollande, en el Palacio del Elíseo, sede del gobierno galo. Compartirán un almuerzo privado y luego presentarán ante los periodistas.
El encuentro viene cargado de expectativas. La relación de ambos es buena e incluyó, en los últimos tiempos, señales de proximidad, como la decisión del gobierno francés de presentar un amicus curiae en respaldo a la Argentina en el juicio iniciado por los fondos buitre que tramita en la justicia estadounidense. Eso no impide que la gestión de Hollande consulte por los intereses económicos de las empresas francesas presentes en la Argentina. O que transmita el interés de aquellas que están pensando en volver a invertir, sobre todo en los rubros con perspectivas favorables, como los yacimientos de energía no convencional.
Desde la mirada de Francia, las prioridades en la relación con la Argentina están vinculadas con el –postergado– acuerdo económico entre el Mercosur y la Unión Europea. Desde la mirada de Francia, las prioridades en la relación con la Argentina están vinculadas con el –postergado– acuerdo económico entre el Mercosur y la Unión Europea: los países europeos siguen buscando mercados para los productos que sus ciudadanos no consumen (los saldos exportables), debido a la crisis.
Otra cuestión difícil para ambos gobiernos es cómo poner fin a algunos problemas pendientes, como los juicios en el tribunal arbitral del CIADI entablados contra la Argentina por las empresas francesas Suez y Saur. Ambas compañías obtuvieron fallos favorables. Un caso similar es el de la petrolera Total, también francesa, que presentó una demanda contra la Argentina en el tribunal de arreglo de diferencias relativas a inversiones del Banco Mundial.
Estos antecedentes explican por qué hay tanta expectativa en la cumbre con Hollande de hoy al mediodía. El gobierno argentino, hasta ahora, viene mostrando señales de negociación. Incluso se habla de que podría ofrecer alternativas de inversión en sectores atractivos.
Habrá que ver qué sucede en la jornada de hoy. Tras el almuerzo y la declaración conjunta con Hollande, Cristina podría reunirse con los directivos de la empresa Total. No se descarta que reciba a Christophe de Margerie, CEO y presidente de Total, cuarto grupo económico especialista en crudo y gas del mundo. En la Argentina es sponsor, desde hace unos años, del club Boca Juniors.
Más compleja promete ser, de acuerdo a la información que circula dentro del oficialismo, la aceptación de una alternativa de pago con el Club de París que incluya bonos y cronogramas escalonados, como pretende la Casa Rosada. Los sectores más intransigentes dentro del Club estarían dispuestos a mantener la exigencia de un pago al contado en efectivo de 1800 millones de dólares en julio de 2013, más 12 cuotas de 580 millones a partir de enero de 2015. «
Miércoles, 19 de marzo de 2014
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