Caso Nisman Las noticias en su laberinto Las comunicaciones que hacen el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal a través de sus portales de noticias, con el objetivo darle mayor transparencia al manejo de la información del caso Nisman, entraron en un laberinto de difícil salida. Las versiones, aclaraciones y desmentidas que publicaron cayeron en el caos de la agenda mediática, de la que intentaban ser ajenos.
“El comentario es libre, los hechos son sagrados”. Charles Prestwich Scott.
Versiones, desmentidas, rectificaciones, nuevas versiones. El caso Nisman, que tiene en vilo a una sociedad entera, puso sobre el tapete el rol de los servicios de inteligencia y su relación con los poderes del Estado de derecho. Pero no sólo eso. Este ‘juego de espías’ que tiene como espectador al ciudadano argentino tiene numeroso vectores a través de los cuales la sed de información puede ser saciada. A los ya tradicionales matutinos, sumados a las versiones online que casi funcionan como un streaming de novedades de la causa, se le suman los dos nuevos actores que sirven como fuente de información: los portales de noticias del Poder Judicial de la Nación, con el Centro de Información Judicial (cij.gov.ar) y de la Procuración General de la Nación, fiscales.com.ar. A lo largo de estos días de investigación, ambos portales subieron sendos comunicados sobre el curso de la pesquisa. El CIJ se encargó de la comunicación de los jueces, la crónica de la investigación de la jueza Fabiana Palmaghini detallando los actos procesales cumplidos hasta el 27 de enero y la reciente publicación de la resolución del juez Ariel Lijo por la cual elevó a sorteo la denuncia de encubrimiento presentada por Alberto Nisman, dan cuenta de ello. La denuncia del propio Nisman, pese a que se trató de un escrito elaborado por un fiscal, se difundió por el CIJ. Los siete comunicados de la fiscal Viviana Fein fueron difundidos por fiscales.com.ar. Antes de eso, cuando todavía no se salía del estupor por la noticia, el portal ya había publicado que Fein iba a dar a conocer los avances de la causa por medio de esa página, en un intento por restarle presión mediática tratando de que todos los medios tuvieran la misma fuente. Pero la realidad los excedió. El intento de darle un cauce institucional al curso de la información y que a partir de allí que se difunda, quedó en el medio del fuego cruzado de lo que parece ser una guerra informativa. Al tiempo de ser publicada la resolución mediante la cual Lijo se declaró incompetente y giró la causa a sorteo, y la consiguiente novedad de que el Juzgado de Daniel Rafecas fue desansiculado para continuar su trámite, comenzó a circular la noticia de que el propio Rafecas, de licencia hasta fines de febrero, se había declarado incompetente. Sí, un juez que estaba kilómetros de su Juzgado habría decidido horas después de saber que iba a tener que tramitar la denuncia que nadie quiere que le toque, sin tomarse un tiempo prudencial para leer los fundamentos por los cuales su colega declinó su competencia en el caso, que la causa no le correspondía. Su reemplazante, Sebastián Ramos, tampoco dio señales de si iba a aceptar, o no, la competencia del Juzgado. Otro punto sobresaliente, Ramos no habría estado ayer en su despacho. Sin embargo, se maneja la certeza de que será la Cámara Federal la que defina qué juez seguirá. Fiscales.com también quedó preso de sus buenas intenciones. En el día domingo el diario Clarín publicó que se encontró en un cesto de basura en el departamento de Nisman un borrador de la denuncia en el que se pedía, previo proceso de desafuero, las detenciones de tres de los denunciados, Cristina Fernández de Kirchner, Héctor Timerman y Andrés Larroque. El lunes la publicación desató la furia del jefe de gabinete, Jorge Capitanich, que en su habitual contacto matutino con los medios, rompió la página del diario que tenía semejante noticia. Ese mismo día, el portal de la Procuración publicó un nuevo comunicado de Fein, en el que se señaló que la fiscal “quiere aclarar que, ante versiones periodísticas publicadas durante el fin de semana, en el departamento del fiscal no fue hallado ningún borrador de la denuncia oportunamente presentada por Nisman y que no figura en el expediente algún registro de los aludidos en los artículos publicados”. El CIJ hizo lo propio dando a conocer un comunicado del Juzgado a cargo de Lijo, en el que “aclara que la denuncia de la Unidad Fiscal de Investigación para la causa AMIA presentada ante este tribunal fue recibida sin testado alguno y que fue decisión de este juzgado suprimir (tachar) del texto oportunamente difundido a través del Centro de Información Judicial (CIJ) la diligencia de prueba requerida en esa denuncia por el fiscal Alberto Nisman como medida de preservación de lo allí solicitado. Se trata sólo de supresión de medidas de prueba y no de ninguna otra petición sustancial respecto de los presuntos imputados. Esa versión fue publicada por el CIJ sin modificación alguna”. Esta mañana se dio a conocer un facsímil del borrador. Tras ese evento, se anunció un nuevo comunicado “la titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N°45 quiere aclarar que en lo referente al material secuestrado del tacho de basura del fiscal Alberto Nisman, en el día de ayer la información fue transmitida de manera telefónica y no personal, lo cual provocó un error involuntario en el comunicado anterior. La fiscal aclara también que el contenido del comunicado publicado no fue alterado sin su consentimiento luego de dicha comunicación”. Habría que explicar cómo se puede aclarar que no había algo, y luego volver a aclarar que fue un error involuntario publicar que no fue hallado ningún borrador pero un día después. El problema es que no se indicó si el borrador está o no, sólo se atinó a mencionar que “en el domicilio de Nisman se secuestró diferente tipo de documentación que aún se encuentra en etapa de análisis”. ¿Cómo puede ser que se haya negado tajantemente que no existía la pieza, pero luego en la aclaración se hace hincapié en que la documentación ‘se encuentra en etapa de análisis’? En su búsqueda por ‘acercar la justicia a la sociedad’, tratando de otorgarle mayor transparencia informativa a los sucesos de los casos que conmocionan a la ciudadanía, los portales de noticias institucionales cayeron en la misma trampa de la que buscan escapar, aportaron mayor confusión a un ya de por sí complejo entramado.
Fuente: Telam
Miércoles, 4 de febrero de 2015
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