Finanzas El Presupuesto 2016 da previsibilidad a las decisiones económicas  El diputado por el Frente para la Victoria, y presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Roberto Feletti se encargará el próximo martes de introducir el debate por el Presupuesto 2016, presentado por el ministro Axel Kicillof esta semana. En una entrevista con Tiempo Argentino, Feletti habló de las proyecciones económicas y la importancia estratégica de un presupuesto que deberá ejecutar el próximo gobierno.
¿Cuál es su análisis del Presupuesto 2016 a la luz de los 12 años de gobierno kirchnerista?
–Este es el treceavo presupuesto que se presenta en tiempo y forma, lo cual para la Argentina no es poco. El segundo hecho conceptual es que el presupuesto mantiene la política fiscal de los últimos 12 años. Durante muchos de los años de democracia en la Argentina, el presupuesto era una cuestión de incertidumbre para el conjunto del pueblo. El debate era si el Fondo Monetario acordaba, si había recortes en la educación, en salud, rebaja de jubilaciones, autorizaciones de desendeudamiento desmedido, impuestazos.
–¿Y en la actualidad?
–En estos últimos presupuestos nos encontramos con el hecho de que hay previsibilidad. Tenemos 13 años de una política fiscal en línea, que se encuentra afectada por la situación internacional e interna, pero que cualquier ciudadano de a pie que ve el presupuesto no tiene miedo sobre su futuro, no hay tensiones, no hay recortes. Esto otorga mucha previsibilidad a las decisiones económicas y la acción sobre el consumo y la actividad. Es un presupuesto cómodo para el pueblo.
–¿Cuáles son las debilidades y las fortalezas de cara a 2016?
–El ministro (Axel) Kicillof cuando vino explicó una situación de desaceleración de la economía mundial, y que no obstante, producto de los incentivos fiscales y monetarios, la Argentina logra obtener tasas de crecimiento. Bajas, pero de crecimiento al fin. Lo que está proyectado el presupuesto es un crecimiento del 2,3% y una tasa del 3% para el año entrante. No estamos en 2010-2011, cuando el país crecía al 8%, pero en un mundo donde el comercio internacional crece al 3% anual, con proyecciones débiles para Europa, es un logro de la política fiscal. También lo que hay es una situación difícil en los países emergentes, en especial sobre los países BRICS.
–Pero se prevén mayores precios de commodities y superávit comercial...
–En realidad, respecto del sector externo el presupuesto es moderado. Nosotros llegamos a trabajar con niveles de exportaciones de U$S 80mil millones, y lo que el presupuesto prevé para el año es exportaciones por U$S 65.700 millones y U$S 4000 millones de superávit comercial. Por eso trabajar solo con la cuenta corriente es difícil. Lo que hay que trabajar es la cuenta capital para obtener flujos de inversiones que financien esta expansión de la economía.
–¿Cuál es la perspectiva de la deuda? ¿Nos vamos a reendeudar?
–Es importante recordar que el segundo mandato de la presidenta tuvo y tiene niveles de pagos de deuda muy fuertes, U$S 12 mil millones por año. A partir de ahora, en el período 2016-2019, nos vamos a encontrar que ese promedio gira en torno a los U$S 4000 millones, cae a un tercio. Tenemos un horizonte menor de vencimientos. Lo que tenemos que conseguir es la normalización de los pagos al exterior. La Argentina tiene dinero y voluntad de pagar, pero los acreedores no pueden cobrar. Hay que hacer un esfuerzo para restablecer la cadena de pagos, lo cual va a dejar a la Argentina en una condición muy buena para el financiamiento. Acá no se trata de financiarse para solventar un desequilibrio del Estado o la fuga de capitales, sino de financiar un nivel de expansión de la economía en estos niveles que son muy altos. Si algo reconoce todo el mundo es que el mercado interno es robusto y potente, y eso no puede decaer.
–¿Esto incluye un acuerdo con los buitres?
–Es fundamental la normalización. Incluye un arreglo con los holdouts. No sé si con los buitres. Vos tenés U$S 1600 millones que son los buitres, pero también U$S 5500 millones de los me too. La oferta tiene que contener a todos, pero no necesariamente tiene que reconocer los U$S 1600 millones de Singer. Tenemos un piso, que son los bonos del canje y un techo, que es el fallo de Griesa. En ese rango te podés mover para una oferta. Ahora, si se logra restablecer la cautelar que te permita restablecer la cadena de pago con los holding y realizar una oferta para todos, vamos a lograr una solución definitiva al problema de la deuda, lo que nos va a dar acceso al crédito internacional.
–Ahora se va a ratificar la votación de la ONU contra los buitres. ¿Esto limita la negociación?
–Lo de la ONU fue un gran triunfo diplomático. Por eso hay que materializar ese logro en efectividades conducentes. Eso refuerza la posibilidad de la Argentina en la negociación, no la debilita.
–¿El 64% de inversión social es un piso que el gobierno le lega al próximo?
–Tiene que ver con las políticas fiscales consistentes. Vos lograste en estos años una tasa de inversión social que supera el 60%, y una de inversión pública que ronda el 15 por ciento. Por lo tanto, tenés un presupuesto que en su 75% es inversión. Es un logro que hay que cuidar, y es un gran éxito. Y me parece que eso es lo que ha garantizado un esquema de demanda fuerte y lo que ha garantizado. Justamente eso es lo que le da certidumbre al pueblo. La gente no se asusta, ve esas tasas y se siente tranquila.
–Un tema muy debatido es el del tipo de cambio, de $ 10,60 promedio para 2016. ¿Es creíble?
–A mí me tocó manejar 7 presupuestos, como viceministro y como presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Efectivamente, algunas proyecciones no coinciden, pero nunca hubo un desborde inflacionario ni cambiario.
Las brechas nunca fueron más allá de un 20 por ciento. El presupuesto, además, crea expectativas por la positiva. Por primera vez en la historia, la Argentina no se enfrenta al fatalismo de un golpe de mercado.
También opinó sobre Scioli y Macri, de cara al período 2016
–¿Cree que el presupuesto es compatible con el programa de Scioli?
–Absolutamente. Este programa se complementa con lo que viene diciendo Scioli. Un dato importante es que la tasa de crecimiento de la inversión es del 4,2 por ciento. El equipo económico reconoce la necesidad de inversión, y eso es muy interesante. Si nosotros ponemos un foco en la inversión con un sector externo ajustado, la forma es lograr financiamiento. Efectivamente uno de los desafíos es que la Argentina pueda cruzar los umbrales del desarrollo. Es decir, expandir estos niveles de producción y consumo y hacerlo de manera sistémica. ¿Para qué querés inversión? Para ganar competitividad, y no hacerla depender del tipo de cambio, para mejorar las posibilidades de inversión tecnológica y esto es absolutamente compatible con las propuestas de Daniel Scioli.
–Pero si ganara la oposición...
–Sería un gran retroceso para el país.
–¿Pero si ganara, cumpliría con este presupuesto?
–Si no lo cumple, pagará los costos de no cumplirlo. Si se retrocede de 6,5% de tasa de inversión educativa, si se retrocede de una cobertura previsional del 93% con dos aumentos por año, si acá se retrocede de este Estado de Bienestar que otorgó ingresos para las personas vulnerables, sea chicos o adultos, yo creo que la Argentina va a estar complicada, sobre todo en este mundo. Por eso yo creo que la gran expectativa es la llegada del cuarto mandato en cabeza de Daniel Scioli. Ese esquema tiene que ser conservado y va a ser conservado si nosotros somos gobierno.
–¿Qué cree que piensa Macri?
– Si uno escucha a Macri, lo único que dice es cómo recomponemos la tasa de ganancia como dé lugar. Macri no está hablando de otra cosa.
–¿Hay un fin de ciclo?
–Si gana Scioli, el nuevo ciclo se articula con los anteriores. Macri plantea es una caída de la distribución del ingreso.
Fuente: Infonews
Martes, 22 de septiembre de 2015
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