Peru Discusiones y análisis en Cumbre del FMI ponen de manifiesto que recuperación de la economía mundial está lejos de materializarse  La cumbre Anual del FMI-Banco Mundial celebrada en Lima, en la que participaron el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, dejó en claro que la tan esperada reactivación de la economía mundial está aún lejos de materializarse. Durante el encuentro un aspecto relevante fue la ambivalencia de los discursos, ya que por un lado los organismos multilaterales intentaron sobreactuar cierto optimismo en torno a la evolución de las economías centrales, pese a los números duros, pero no pudieron ocultar la larga lista roja de objetivos pendientes que se acumulan desde la crisis financiera internacional de desatada en 2008.
A dicha lista se sumaron los nuevos desafíos como los refugiados que llegan de a miles a Europa y los alertas por el impacto de movimientos en las tasas de interés de EEUU, y su impacto en los movimientos de capitales.
En ese marco, Kicillof fue uno de los actores que de la cumbre que se animó a hablar abiertamente de que la crisis no terminó, que los países emergentes siguen siendo el motor de la economía mundial -crecen en promedio 4%, contra 2% los avanzados- y que el mundo y los países altamente endeudados no puede darse el lujo de descuidar la instrumentación de acciones tendientes a limitar el accionar de los fondos buitre,
"Se trata ahora de cargar las tintas contra los países emergentes que están siendo afectados por la caída de los commodities y la salida de capitales, y encarecimiento del financiamiento", antes que revisar lo que no funciona en las naciones centrales para dinamizar las economías, advirtió el ministro argentino.
El título de informe pronósticos mundiales del FMI fue bastante sugestivo al respecto ("Ajustando hacia precios de commodities más bajos!"). Allí quedó claro quiénes son los perjudicados (los exportadores de materias primas) y de las recetas ortodoxas que piden volver a aplicar.
En contraposición a estas recetas, Kicillof también se refirió a la necesidad de llevar a la práctica políticas contracíclicas, que tiendan a la distribución efectiva de la riqueza como uno de los dinamizadores del crecimiento económico, y de la demanda del mercado interno, para poder sortear las malas que se vienen del comercio exterior y la salida de capitales.
Kicillof dio cuenta además que no se mide con la misma vara a los países emergentes que a los desarrollados en las estimaciones, cuando pecan por pesimistas en sus proyecciones en los primeros, y por optimistas, en el caso de las naciones centrales, y que luego se ven obligados a corregir.
El Comunicado del G24, la voz de los países en desarrollo, fue un reconocimiento de esta situación, y sostuvo como puntos fundamentales, las acciones recientes en Naciones Unidas en los mercados con las nuevas cláusulas de mayorías, para frenar a los fondos buitre y para mantener la sostenibilidad de la deuda de los países.
"Si los países emergentes sufren problemas de balanza de pagos y salida de capitales, probablemente necesitemos avanzar más en el terreno de las reestructuraciones de deuda soberana", y en "acciones coordinadas de países y sistemas judiciales para que los fondos buitres no puedan hacer ganancias extraordinarios en un marco donde la cuestión financiera es suficientemente frágil" alertó el titular del Palacio de Hacienda durante la cena de trabajo en el G20 del jueves último.
Dicho foro hizo un llamado a los bancos multilaterales de desarrollo (BMD) "para fortalecer su papel en apoyar el desarrollo de infraestructura y la financiación, incluso a nivel regional, manteniendo la sostenibilidad de la deuda".
Para diversificar a los acreedores, dijeron también que esperan "con interés la puesta en funcionamiento del Banco Asiático de Infraestructura Inversión (AIIb) y el Banco de Desarrollo de Nuevos (ND)".
El hecho de que las cosas no andan muy bien en la economía mundial quedó plasmadao en el comunicado final del Comité Monetario y Financiero del FMI, del cual participó Kicillof, y es el órgano donde los países le dan el mandato para las próximas acciones que debe perseguir el Fondo.
"La recuperación global continúa, pero el crecimiento sigue siendo en general modesto y desigual, la incertidumbre y la volatilidad de los mercados financieros han aumentado, y las perspectivas de crecimiento a medio plazo han debilitado", reza el primer párrafo.
En muchas economías avanzadas, "el principal riesgo sigue siendo un descenso del ya bajo crecimiento, sobre todo si la demanda mundial se tambalea más y limitaciones de la oferta no se levantan".
Y los mercados emergentes "deben hacer esfuerzos para suavizar el ajuste de las condiciones externas", léase el impacto por la preparación de los mercados la suba de las tasa de interés de EEUU y el fin de la era de la abundancia de capitales.
Hubo mención a la preocupación por los refugiados y a China que, pese que hay serias preocupaciones por su impacto en la ralentización mundial, el comunicado del IMFC se limitó a mencionar "que es bienvenido el esfuerzo de China por recuperar el equilibrio hacia un crecimiento más sostenible", lo que implica creer que pese a su corrección reciente, China seguirá siendo el motor global.
Pero la "regulación financiera global" es un tema pendiente, así como lo es el cambio en el poder de voto del FMI, para avanzar en reformas acorde a las voluntades de los países que sostienen la economía mundial nucleados en los BRICS.
"Seguimos profundamente decepcionados con la demora prolongada en la aplicación de las cuotas del FMI de 2010 y de gobernanza reformas....sigue siendo nuestra mayor prioridad e instar a los Estados Unidos para ratificar las reformas de 2010", reza el comunicado del IMFC,.
Esta cumbre celebró también los avances del G20 en materia de lucha contra la evasión y lavado de dinero. La persistencia de la crisis internacional hizo que los gobiernos de los países centrales se pusieran manos a la obra con estrategias para generar recursos adicionales.
Debido a que las Pyme en sus economías, sobre todo la europeas, ya no tributan como antes consecuencia del bajo crecimiento mundial, los Estados decidieron encarar el camino de ir tras los sectores que antes parecían intocables y encarar acciones conjuntas contra el lavado de dinero y la evasión, pese al fuerte lobby de las empresas multinacionales que hasta ahora habían logrado postergar el tratamiento del tema desde que estalló la crisis hace siete años.
No es casualidad, en este sentido, la aparición reciente de "arrepentidos" en el mundo al estilo "Falciani", que ayudaron a esclarecer maniobras de elusión y evasión fiscal, aún en beneficio del fisco en la Argentina.
En ese marco, Kicillof saludó la decisión de los países miembro de la OCDE de impulsar -inicialmente en 90 países- el Proyecto OCDE/G20 de Lucha Contra la Erosión de la Base Tributaria y el Traslado de Beneficios (BEPS, por sus siglas en inglés).
Fuente: Telam
Sábado, 10 de octubre de 2015
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