Economía Desplome del consumo de productos básicos
Los índices muestran una caída en el consumo de lácteos y carne. También baja en otros productos y en los servicios.
El consumo de lácteos y carne ha caído significativamente en el primer semestre de 2024, reflejando la gravedad de la crisis económica en la que vive Argentina, donde 1 de cada 5 personas es indigente. Esta crisis económica podría derivar en una crisis humanitaria, con un aumento del hambre, la malnutrición, la mortalidad infantil y las enfermedades.
Bajo el gobierno de Milei, el consumo per cápita de carne vacuna ha caído a 45 kilos anuales, el nivel más bajo en 110 años, según la Bolsa de Comercio de Rosario. En medio de la crisis, los argentinos están migrando hacia proteínas más económicas como el pollo y el cerdo, lo que ha llevado a una caída general del consumo de carnes, que se estima en 105,7 kilos por habitante, un 9% menos que en 2023 y el nivel más bajo desde 2011.
La Bolsa de Comercio de Rosario informa que en 2024, por primera vez, los argentinos consumirán la misma cantidad de carne vacuna que de pollo, unos 44,5 kilos per cápita, lo que representa una caída histórica en la proporción de carne bovina. Además, el poder adquisitivo del salario promedio permitirá comprar un 5,6% menos de carne asada que en 2023. Comparado con el promedio de los últimos diez años, cada argentino consumirá alrededor de 22 kilos menos de carne en 2024, una caída del 13,3%.
El consumo de lácteos también se desplomó, con una caída del 17,6% en el primer semestre de 2024. Se estima que el consumo per cápita de lácteos será de 156,3 litros, frente a los 194 litros de 2023. Esto incluye una disminución del 17,3% en la compra de lácteos en toneladas y del 14,4% en litros. Los quesos, que constituyen el 60% del consumo de lácteos, cayeron un 18% interanual, mientras que los postres y flanes bajaron un 53,4%, los yogures un 22,2%, la manteca un 16%, la crema un 12% y el dulce de leche un 13,7%.
El derrumbe en la compra de alimentos muestra en toda su plenitud los graves datos de la encuesta publicada por UNICEF Argentina este año. Ahí se informa que un millón de niños se van a la cama sin cenar. La cantidad llega a un millón y medio si se considera a los que se saltean alguna comida durante el día. Los adultos que viven en esos hogares que se saltean alguna comida se eleva a 4.5 millones, en muchos casos porque priorizan que sus hijos puedan alimentarse.
El Índice Banco Provincia de Consumo (IBP Consumo) registró en junio una caída del 0,8% en comparación con el mismo mes de 2023, a pesar de un aumento del 31,7% en la cantidad de clientes del banco. Aunque la billetera virtual de BAPRO creció debido a promociones en comercios esenciales, el aumento del consumo fue solo del 4,4% interanual. La mayor caída del consumo se observó en la Región Metropolitana de Buenos Aires.
Según el Indicador de Consumo de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), en junio hubo una caída interanual del 9,8% en la compra de bienes y servicios, el peor retroceso desde la pandemia. El poder de compra de los hogares cayó un 21%, lo que ha llevado a la reestructuración de los gastos familiares. Todos los rubros registraron caídas significativas en comparación con junio de 2023: indumentaria y calzado bajaron un 26%, recreación y cultura un 33,7%, y transporte y vehículos un 12,4%, con una caída del 24% en patentamientos de autos. Alquileres y servicios públicos también cayeron un 5,7%, con una menor demanda eléctrica en comercios e industrias. Los servicios como cuidados personales, financieros, educación y salud disminuyeron un 5,1%, un 2,2% por debajo del nivel prepandemia.
Miércoles, 14 de agosto de 2024
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