conflicto Supermercados Chinos adhieren al boicot a las compras en hipermercados Aglutinados en Cedeapsa, sumaron su adhesión al boicot convocado para este jueves contra los grandes hipermercados, a los que atribuyen el rol de formadores de precios y consideran responsables del alza de los valores en góndolas a través de las rema Yolanda Durán, titular de esa cámara comercial, dijo a Télam que los convocantes a la protesta, la asociación Consumidores Libres, la CTA y la Federación Agraria, entre otros, "tienen todo su derecho a quejarse por los aumentos de precios de las grandes cadenas. El boicot es para que frenen las remarcaciones y reconsideren su rol en la formación de precios y en sus márgenes de ganancia".
También planteó que "hay que observar el aumento de costos y la suba de precios de parte de los proveedores y cuánto de eso se traslada al valor final que paga el consumidor".
Al señalar a los responsables de las subas de precios, el dirigente dijo que "son un combo entre los grandes productores de alimentos y las cadenas de hiperpermercado", razón por la cual defendió a las marcas propias de los actores de este sector comercial como posibilidad de ofrecer una alternativa más económica en contraposición a las marcas líderes.
Sostuvo además que la diferencia de precio entre las marcas líderes y las propias está en una franja de entre 15 al 18% y señaló que "muchas veces es el mismo producto pero en diferente packaging".
"Ojalá que la protesta sirva para que las grandes cadenas de supermercados e hipermercados recapaciten; que tengan conciencia de su accionar", explicó y consideró que el público consumidor reacciona "cuando le tocan el bolsillo".
"A esto se le suman las subas tarifarias, que no dan derecho al pataleo, el que no paga tiene su servicio cortado", reflexionó y consideró que estas circunstancias originan "malhumor, tensión y tristeza".
Al dimensionar al supermercadismo chino en la Argentina, el referente del sector dijo que son locales de pequeña y mediana superficie, con 10.000 comercios distribuídos en la Capital Federal, Gran Buenos Aires y las principales ciudades del interior.
En tanto, Miguel Ángel Calvete, director Ejecutivo de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas de la República Argentina (FESACH), indicó que, el lunes último, su asociación inició un lock out de compra a proveedores y grandes industrias ante el aumento desmedido de precios, medida que se prolongará hasta el viernes próximo inclusive.
"La medida no incluye productos lácteos y perecederos", pero confirmó que "restringe en su totalidad la compra del resto de los artículos".
También detalló que el reclamo "registra hasta el momento un alto grado de adhesión en más de 2.000 comercios de Capital Federal, Gran Buenos Aires, La Plata, Mar del Plata y Rosario".
A su turno, Pedro Bussetti, de la asociación Deuco, dijo a Radio 10 que la entidad adhiere a la protesta y propone que sea "masiva, pacífica y democrática en rechazo a todo lo que venimos padeciendo los argentinos hace 90 ó 120 días. Esta inflación nos castiga y nos reduce el salario en forma permanente y no tiene por parte del Gobierno nacional ninguna medida que propenda a la reducción, a la eliminación" de la suba de precios.
"Sumado a esto, el Gobierno incentiva a esa reducción del poder adquisitivo al aplicar un ajuste salvaje en los servicios públicos", se quejó.
"Los aumentos de precios tienen un conjunto de variables. Evidentemente, hay una responsabilidad de quienes son los formadores de precios: la industria y las grandes cadenas de supermercados", sentenció.
A su turno, Alberto Guida, el titular de las cámaras que agrupan a los proveedores, dijo a Télam que "a mí como proveedor mayorista me conviene que hagan una protesta contra las grandes cadenas. Otra cosa es preguntarse si es justo o injusto para el dueño de la verdad que es el consumidor".
Sostuvo que "lo que es conflictivo y ambiguo es cuando los supermercados lanzan ofertas por ejemplo de tres productos al precio de dos y eso obliga al consumidor a comprar más cantidad para pagar menos precio pero quizá no necesita tanto volumen. Esto también demuestra que los hipermercados, si quisieran vender esos productos en unidad, los podrían bajar de precio".
"Esa venta en cantidad injustificada genera sensación negativa en un contexto de baja del poder adquisitivo", señaló.
El boicot de compras para mañana cuenta también con la adhesión de la Confederación General del Trabajo (CGT) que responde a Hugo Moyano, la CTA de Hugo Yasky y la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA), así como de diversos dirigentes políticos y sociales.
Miércoles, 6 de abril de 2016
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