ECONOMIA Conflicto con Adidas: Gobierno dictó la conciliación y quiere reconvertir al fabricante local de calzado  En vísperas de las elecciones primarias, el Gobierno dictó la conciliación obligatoria en el conflicto que enfrenta a la fabricante Extreme Gear con Adidas por la caída de pedidos de la firma alemana. Así el gobierno, ganó tiempo y evitó por ahora unos 300 despidos en la provincia de Buenos Aires, donde la proveedora local ensambla zapatillas de la reconocida marca en sus plantas de Echeverría y Lanús.
La resolución fue adoptada este jueves por la noche en la sede de La Plata del Ministerio de Trabajo bonaerense, que priorizó contener la conflictividad en medio de los cierres de empresas registrados en las últimas semanas en el territorio de la gobernadora María Eugenia Vidal.
Las autoridades además rechazaron el Proceso Preventivo de Crisis solicitado por Extreme Gear para reducir el pago de indemnizaciones al 50% y le sugirieron que inicie su reconversión para asistir a los eventuales cesanteados con subsidios.
La audiencia, que comenzó a las 12 y se extendió hasta la noche tras un cuarto intermedio, fue encabezada por el subsecretario de Trabajo, Mariano Oscar Muñoz, y la directora de relaciones laborales del sector privado, Aixa Laura Petriati Grizzuti.
Por la parte sindical participó el titular del gremio del calzado Uticra, Agustín Amicone, mientras que la tercerizada estuvo representadas por directivos y la multinacional por sus abogados.
Horas antes, Extreme Gear había amenazado con realizar nuevos despidos y un “zapatillazo” en Plaza de Mayo, sin fecha ni horario.
La anunciada entrega de 2.000 pares de calzado apuntaba a llamar la atención de las autoridades y presionar a la vez a la firma alemana que, según los directivos de la proveedora, dejó de enviar materia prima para producir zapatillas en las plantas de Echeverría y Lanús y, en su lugar, empezó a traer calzado terminado desde Asia.
La conciliación dictada por la Provincia al filo de los comicios, sin embargo, forzó a la empresa local a retener el personal en sus plantas, donde emplea a 450 personas, al menos por 15 días hábiles, aunque podría extenderse más allá de agosto.
Los funcionarios le rechazaron el PPC por considerar que no cumplió todos los requisitos.
“Vamos a trabajar hasta septiembre, y después se despedirá a 300 empleados”, advirtió a iProfesional el jefe de planta de Lanús, Giovani Portanova.
Desde el Gobierno y Uticra, en cambio, sostienen que se trata de un “conflicto comercial” entre ambas empresas, antes que de un problema de comercio exterior.
Según esta versión, la tercerizada le debería entre 13 y 16 millones de dólares a la filial de Adidas en Holanda, encargada de la venta de la materia prima a las plantas ensambladoras de partes y kits importados.
“Las importaciones de calzado terminado de Adidas están un 20% por debajo de las del año pasado, en volúmenes. Por lo tanto, la situación de Extreme Gear no es consecuencia de una sustitución de producción local por importaciones”, argumentaron fuentes oficiales cercanas a la negociación.
Añadieron que las autoridades intervinieron para “encontrar una solución que no perjudique a los trabajadores”.
En esa línea, los funcionarios comenzaron a explorar la opción de inscribir a la fabricante local en el programa de Transformación Productiva que depende del Ministerio de Producción, por el cual los trabajadores despedidos (como en Banghó, Alpargatas e Infomática Fueguina) reciben subsidios de desempleo ampliado y capacitación hasta ser eventualmente reubicados en otra empresa.
El programa es sólo una de las herramientas a las que apeló el Gobierno en las últimas semanas ante los sucesivos casos de despidos en la Provincia.
Desde el cierre y desalojo violento de la planta de Pepsico, en Vicente López, el Ejecutivo decidió apostar por la vía de la negociación, tal como ocurrió en Cresta Roja.
A su vez, el Ministerio de Trabajo desempolvó los subsidios para evitar despidos –los Repro- en Alpargatas, que fabrica las Topper. Fuente:Iprofesional
Lunes, 14 de agosto de 2017
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