Economía Sequía: por cada dólar que se dejó de exportar, se perdieron solo u$s 0,32 de importaciones Es la ecuación en la primera mitad del año, según un análisis privado. Si el BCRA hubiera querido mantener sus reservas, las importaciones tendrían que haber disminuido en u$s10.869 millones.
De acuerdo con la estructura del comercio exterior argentino, más del 75% de las importaciones del país son bienes que se usan para la producción, lo que implica que una contracción de las mismas es sinónimo de menor actividad económica. Puede ser que una caída de la producción provoque menor demanda o que, al revés, ante una menor oferta de dólares se tenga que importar menos y eso pueda llegar a disparar una recesión. Argentina está tratando de evitar el segundo escenario.
Según plantea Nadín Argañaraz, director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), en la primera mitad de 2023, por cada dólar que se perdió de exportaciones por efecto de la sequía las importaciones disminuyeron en 32 centavos.
El economista estimó en un informe que, si el Banco Central hubiera querido mantener sus reservas, las compras del exterior este año tendrían que haber bajado un 26% (u$s10.869 millones). Con ello la balanza comercial hubiera sido superavitaria en u$s2.900 millones al igual que en la primera mitad de 2022.
“En un país sin crédito, el conflicto de objetivos es claro: más disponibilidad de insumos y bienes intermedios para la producción o más dólares en las reservas”, señala Argañaraz.
El año pasado, las exportaciones sumaron unos u$s44.377 millones y las importaciones u$s41.284 millones, mientras que este año es de u$s33.509 millones y u$s37.897 millones, respectivamente. La pérdida de ventas fue de u$s10.869 millones, en tanto que la baja de las compras fue de u$s3.405 millones, lo que marca la relación de 0,32 a 1. El estudio de Argañaraz destaca que en términos de cantidades, las importaciones del primer semestre apenas bajaron 5,5%. En otras palabras, el Gobierno buscó evitar un desplome pronunciado de la actividad, pero el costo fue perder las reservas internacionales.
Cuando se le consulta a los funcionarios del Ministerio de Economía cómo se puede resolver el problema de la falta de reservas responden que “exportando más”. Y la realidad indica que es así. La fuerte caída de las exportaciones que sufrió la economía debido a la sequía tuvo un efecto devastador.
Gabriel Caamaño, de la consultora Ledesma, señaló a Ámbito que el Gobierno ha venido administrando los dólares para la importación desde el momento de la llegada de Sergio Massa al Ministerio de Economía. “Cuando llegaron lanzaron el nuevo sistema de SIRA y la actividad en el segundo semestre cayó. Lanzaron soja 1 en septiembre y soja 2 en diciembre y con ello juntaron reservas. Luego en el primer trimestre de este año soltaron un poco y hubo un rebote de actividad y luego en el segundo trimestre tuvieron que volver a restringir", explicó. Caamaño considera que se trata de un sistema de “restricciones cuantitativas”, o dicho de otro modo, “están racionando” los dólares disponibles.
Fuente: Ámbito Financiero
Miércoles, 9 de agosto de 2023
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