Economía Javier Milei, dolarización y el laissez faire, laissez passer: qué esperar del mercado cambiario Una nueva era comenzará en la Argentina por estas horas. Como todo comienzo, contiene una cuota de certezas, y otro tanto, de interrogantes, es decir, incertidumbre.
Una nueva era comenzará en la Argentina por estas horas. Como todo comienzo, contiene una cuota de certezas -el rechazo mayoritario de la sociedad a la continuidad del oficialismo expresada en la candidatura de Sergio Massa-, y otro tanto, de interrogantes, es decir, incertidumbre. Sobresalen dos aristas. Por un lado, qué dinámica prosperará hacia dentro de La Libertad Avanza. Es decir, qué grado de autonomía tendrán sus referentes en ese ecosistema que integran con el PRO e incluso Juntos por el Cambio.
Dicho rápido: quiénes serán parte del nuevo gobierno, qué funcionarios serán de la partida, cómo se ordenará la discusión en la mesa de definiciones, etc. Por otro, la segunda arista, más importante, con qué grado de contundencia llegarán las ideas propuestas en campaña por Milei al tablero de control de las políticas a implementarse. Siempre en el marco económico, emergen cuestiones que seguramente necesitarán de una definición de corto plazo, la dolarización, la falta de divisas, la demanda de pesos por parte del público, la posibilidad de conducir un sendero bajista de corto plazo para la inflación, por mencionar algunas.
Dólar sin techo y después Dos evidencias dejó el discurso de Javier Milei en la noche de la victoria. La responsabilidad de que, a futuro, el Gobierno pagará las deudas, aludiendo al FMI, y otra, vinculada más a una omisión: no hubo mención alguna vinculada a una potencial transición que le ponga un piso y techo a la cotización del dólar. Esto, en los términos del corpus de propuestas mileístas, implica necesariamente la idea de que sean las fuerzas del mercado (no del cielo) las que se adelanten a una virtual modificación alcista en la cotización del dólar, una importante devaluación, que en los hechos implicaría también una reducción notable de los pasivos que se acumulan en la moneda local, sobre todo del orden cuasifiscal. Ergo, Milei no sólo mantuvo virgen la promesa de la dolarización en su discurso, sino también lo que ello implica, la posibilidad de una especie de fuerte reacomodamiento de las expectativas del mercado cambiario, mientras se recorre el camino para llegar a diciembre. Si pudiera buscarse una figura, claramente habrá que inclinarse por la expresión de origen francés laissez faire, laissez passer, que hiciera célebre Adam Smith, y que literalmente traducida significa "dejar hacer, dejar pasar", bajo la idea de que el funcionamiento de la economía (y del mercado cambiario) debe dejarse al libre juego de la Oferta y la Demanda, evitando la intervención del Estado o de cualquier autoridad.
Cambio de régimen Hay mucho que podría mencionarse y que resuma pregunta. ¿Qué programa de gobierno prepara La Libertad Avanza? ¿Cuántos funcionarios potenciales le aportará el PRO y Juntos por el Cambio? ¿Qué medidas serán las primeras que se llevarán a cabo?
En un escenario impar, inédito, complejo, temas tan relevantes como inflación, deuda, FMI, exportaciones, reservas seguramente demandarán señales más concretas. La duda que podría no develarse en las próximas horas es qué tipo de plan de estabilización se aplicará y quién pagará el costo de dicha reforma. He ahí la pregunta que busca respuesta y que probablemente deberá esperar al 10 de diciembre. Resetear el sistema monetario, cambiar de régimen, recortar el gasto público, reforma del Estado, educación, desregulación de la cuenta capital, etc., todo eso comenzará a ser evaluado por aquellos que buscarán prefigurarse lo que espera a los argentinos.
En el mientras tanto, variables como la producción, empleo, consumo, inversión han registrado un desempeño aceptable, aunque con cierta volatilidad. La falta de dólares y la exorbitante política de endeudamiento en el pasado inmediato han tensionado la administración del gasto público, ha disparado la inflación a niveles inéditos. Allí promete intervenir Milei. La mala praxis en la conducción del Banco Central fomentada por el cogobierno con el FMI ha hecho el resto. Aquí la variable tiempo es más importante. Porque podría pensarse que tanto el complejo agroexportador -en 2024 sin sequía- y las exportaciones de minerales críticos e hidrocarburos podrían devolverle un fuerte ingreso de divisas. Y que esa vital inyección de recursos podría servir para consolidar sectores económicos que le quiten presión a la restricción externa. Como nunca, la pregunta es por el corto plazo. En el largo, ya lo dijo Keynes. También Milei.
Fuente: Ámbito Financiero
Lunes, 20 de noviembre de 2023
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