Impositivo Impuesto a las Ganancias: ya se paga más del doble que hace dos años Quienes ganaban $12.300 brutos en 2012, les descontaron por el tributo unos $3.600 anuales, equivalente al 2,8% del sueldo bruto. Si ahora, perciben $20.800 –un 69% más por el efecto acumulado de la suba en 2013 y en 2014-, le descontarán $14.300
En los últimos dos años, el peso del Impuesto a las Ganancias sobre los salarios medios creció más del doble entre los empleados que lograron empatar sus sueldos con la inflación real. Esto ocurre porque el Gobierno no actualizó las escalas ni el mínimo no imponible y esto parece haber quedado totalmente descartado luego del traspié judicial ante los fondos buitre que requerirá más recursos al fisco. Además, por la misma razón se prevé que este año no se excluirá al medio aguinaldo del cálculo del impuesto como se hizo en años previos. Así, en 2014 los asalariados sufrirán un descuento anual por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) que será más de 100% mayor al que soportaron durante 2012. Así teniendo el mismo el poder de compra salarial, el ingreso de bolsillo terminará siendo más bajo por el mayor impacto del impuesto. En tanto, los que recibieron aumentos inferiores a la inflación, en 2014 tendrán un salario real más bajo, y aun así también pagarán más Ganancias o pagarán lo mismo que en los años anteriores. En todos estos casos, por Ganancias o por la mayor inflación en relación a la suba salarial, o por ambos factores a la vez, se produce una importante disminución en el ingreso real de esos trabajadores. Nadin Argañaraz, del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) sostuvo que si un trabajador casado con 2 hijos tuvo en 2013 y 2014 aumentos nominales del 30%, acorde con la inflación, “en todos los niveles salariales considerados, la incidencia efectiva de Ganancias aumentará en 2014, siempre y cuando el gobierno no establezca algún cambio”. Y dijo que eso se da por tres factores: -En 2012 y 2013 una cuota del aguinaldo quedó desgravada del impuesto. Este año por ahora no. -En 2014 no subieron los mínimos ni se actualizaron las escalas, que datan de fines de 1999. - Al no incrementarse los mínimos y no desgravarse el aguinaldo el incremento final de la ganancia imponible es nominalmente superior y en consecuencia impacta más significativamente la falta de ajuste de los tramos de escala. Así por ejemplo, quienes ganaban $12.300 brutos en 2012, les descontaron por Ganancias unos $3.600 anuales, equivalente al 2,8% del sueldo bruto. Si ahora, ganan $20.800 – un 69% más por el efecto acumulado de la suba del 30% en 2013 y en 2014-, le descontarán $14.300 anuales, un 297% más, equivalente al 6,5% del sueldo. Así en 2 años, el peso del impuesto pasó del 2,8 al 6,5%, un 131% más. Andres Mir, del IARAF, agregó a Clarín que “si el gobierno decidiera subir los mínimos y demás deducciones, la ganancia imponible crecería menos y por ende impactaría menos la falta de actualización de los tramos de escala de quiénes continúan tributando Ganancias. Hasta ahora, sin cambios en los mínimos, se potencia el impacto de la falta de actualización de las escalas, y tiene el efecto de ir aumentando la importancia relativa del impuesto en el bolsillo del trabajador”. En cambio, Mir agregó que “si suben los mínimos, quienes el año pasado pagaban Ganancias y este año reciben un incremento salarial nominal, pueden dejar de ser contribuyentes, además del efecto de la menor ganancia imponible sobre el resto de los trabajadores”. Una alternativa que se aplicó en los últimos años fue excluir al medio aguinaldo del cálculo del impuesto. Eso evitaría este mes un salto en la escala del impuesto (por ejemplo del 9 al 19% o del 19 al 23% como pasará en la mayoría de los casos) y permitiría que al trabajador le sigan descontando lo mismo que en los últimos meses. Pero como eso no se hizo, todos pagarán más impuesto en los próximos días cuando cobren el sueldo de junio y el aguinaldo.
Fuente: Iprofesional
Lunes, 23 de junio de 2014
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